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24 de Noviembre de 2013

Cultura de Iberoamérica urge de agenda digital para fortalecerse

Zaragoza (España) El V Congreso Iberoamericano de Cultura se preguntó cómo estaba la cultura de la región y la encontró más unida que nunca, pero aún en proceso de conectarse al mundo digital. El encuentro reunió, durante dos días, a 147 prominentes académicos, artistas y jerarcas de cultura en Zaragoza (España) y finalizó este viernes.

La dificultad para conectarse de gran parte de la población, la variada calidad de los medios culturales y la experimentación con las herramientas digitales marcaron las principales discusiones del encuentro.

Según el director académico del congreso, Javier Celaya, el debate apunta hacia la necesidad de fijar una agenda digital para la región y la consagración del Espacio Cultural Iberoamericano.

“Iberoamérica se consolida como un espacio cultural innovador en el marco de la sociedad del conocimiento”, declaró el Príncipe de Asturias, Felipe de Borbón, en la clausura.

Dificultad. A pesar de que la mayoría de charlas fueron muy breves –varias se vieron interrumpidas en pleno calor debido al ajustado tiempo– fueron provechosas.

Uno de los que más sufrió por el tiempo fue el diseñador digital colombiano Pablo Arrieta, quien sedujo al público con una atropellada y brillante exposición. Subrayó lo obvio, pero poco mencionado: que la realidad del consumo digital en Latinoamérica no es igual a la europea, y que debe mirarse a la calle para entender lo que sucede.

El sociólogo Frédéric Martel destacó la cuestión: “Internet y las cuestiones digitales no son fenómenos globales, sino territorializados”. “Estamos entrando en el siglo XXI sin resolver problemas de los siglos XIX y XX”, dijo el Secretario de Cultura de la Nación Argentina, Jorge Coscia.

Ponencias sobre emprendimientos culturales, blogueros culturales y la difusión del patrimonio iberoamericano hallaron puentes que sobreviven pese al escaso financiamiento y dificultades de consumo cultural de la región.

Locales. Se extrañó la presencia de más ponentes de Centroamérica (de Costa Rica, especialmente), pues entre las múltiples perspectivas expuestas no había muchas que se asemejasen a la realidad del istmo.

El próximo congreso se celebrará en Costa Rica, en abril, e incorporará más iniciativas independientes, pues su tema es la cultura viva comunitaria. “La cultura es mucho más libre y más independiente que cualquier política, y esto es lo que queremos fortalecer”, declaró el ministro de Cultura y Juventud de nuestro país, Manuel Obregón.

Con solo 16 semanas para su preparación, el congreso costarricense tendrá que hallar la elusiva conclusión que deberían tener estos encuentros: herramientas, decisiones reales y proyectos que salgan de las salas de discusión.

Tomado de wwww.nacion.com